¡CUIDADO! Ambas son peligrosas....

Acaparando la luna…



Odio que te hagas pasar por la luna ¿Qué no vez que la luna nos pertenece a todos?...
Prometiste guardarte en tus valores, bebimos del mismo dolor y sin embargo tú te haces pasar por la luna. 
Ahora dime ¿en qué atardecer te encuentro?  Nada  te halaga más,  que dormir con la noche.
Haciéndote pasar por la luna…


El sabor de la soledad



Es un sorbo penetrante  de viento, tiempo de sobra…
Ausencias olvidadas un poeta renaciente,  sobornado por silencios interrumpibles, en donde los únicos que te conocen suelen ser   la noche bendita, y una sombra de una telaraña existente años atrás.